Proyecto Piloto

Caminos para la Mejora de la Formación e Inserción Sociolaboral

de las Personas con Síndrome de Down

“Down-Up”

1. JUSTIFICACIÓN

La esperanza de vida de las personas con Síndrome de Down ha aumentado en los últimos años, pero acceder a la categoría de persona adulta no es sólo una cuestión de tener dieciocho años o más. La edad es una categoría socio-política que se construye socioculturalmente. Un factor clave para pertenecer a dicha categoría es la independencia económica, que se consigue a través del acceso a un trabajo remunerado. Pero la dificultades de inserción laboral, propias de la sociedad en que vivimos, se agravan en el caso de determinados grupos humanos, entre los que se encuentran las personas con Síndrome de Down. Por otro lado, la formación profesional tradicional no está pensada para responder al reto de formar a estas personas, para lo cual la formación del profesorado es un elemento básico que permite incrementar la calidad de las intervenciones.

Generalmente la inserción laboral de personas con Síndrome de Down se produce en entornos protegidos o “especiales”, es decir, se crean “Centros Especiales de Empleo”, en los que la presencia de estas personas se justifica por su condición de “discapacitad@s” y no por su condiciones de trabajador@s, de ciudadan@s con derecho y deber de trabajar; también se produce a través de lo que se ha dado en llamar el “empleo con apoyo”, que implica el seguimiento y acompañamiento de la persona con Síndrome de Down por parte de “un@ preparador@ laboral” en un entorno ordinario... Nuestra propuesta pretende ir un poco más allá, incidiendo en los contextos formativos y laborales para que sean capaces de dar respuesta a la diversidad. Crear una Europa del pleno empleo sin ningún tipo de exclusión es uno de los objetivos que, según se dijo en la Conferencia de Lisboa, quiere fomentar la Unión Europea. También el Parlamento Europeo recoge entre los “Derechos de las personas que padecen alguna discapacidad”, el “Derecho a la formación continua, a la enseñanza profesional y a un puesto adecuado a su deficiencia”. Nuestro proyecto pretende contribuir a ello.

Nuestra hipótesis de trabajo o punto de partida, y en ello coincidimos con Lou Brown, catedrático de la Universidad de Wisconsin-Madison, es que “en cualquier empresa pública o privada hay un sitio para la persona con discapacidad psíquica grave”, es decir, existen en las empresas “espacio(s) ocupable(s)” para las personas con Síndrome de Down. Por tanto, lo que pretendemos es, previa campaña de sensibilización del empresariado, captar empresas que nos permitan “encontrar” esos espacios y formar a las personas son Síndrome de Down que puedan “ocuparlos” a través de un proceso de formación en el puesto de trabajo, promoviendo así el acceso a un empleo en la empresa ordinaria y con apoyo natural (el de las propias compañeras y compañeros de trabajo). Todo ello porque pretendemos promover una cultura de respecto a la diversidad de las persona tanto en el ámbito de la Formación Profesional como en el mercado de trabajo.

2. OBJETIVOS

Los objetivos concretos que pretendemos conseguir con “Down-Up” son:

1. Sensibilizar al empresariado hacia la contratación de personas con Síndrome de Down.

2. Estudiar y analizar la situación sociolaboral de la población con Síndrome de Down mayor de 16 años.

3. Formar a formador@s ocupacionales de manera que puedan afrontar con éxito la formación profesional ocupacional de personas con Síndrome de Down, tanto en el desarrollo de cursos dirigidos exclusivamente a ellas como para realizar adaptaciones curriculares en el contexto de cursos “normalizados”.

4. Formar a tutor@s de inserción y a los apoyos naturales.

5. Formar a las personas con Síndrome de Down en puestos de trabajo que les permitan acceder al mercado de trabajo “normalizado”.

6. Insertar en empresas ordinarias a jóvenes con Síndrome de Down.

7. Promover una cultura democrática de respecto a la diversidad de las personas que se refleje en el ámbito de la formación profesional y en el mercado de trabajo.

8. Avanzar en la construcción de la ciudadanía plena para las personas con Síndrome de Down.

3. ACTUACIONES

1. Estudio-investigación sobre la situación sociolaboral de personas con Síndrome de Down de más de 16 años que nos permita determinar: nivel de inserción sociolaboral de este colectivo, ocupaciones más representativas, tipo o tipos de contratación más habituales, tipo o tipos de empresas...

2. Campaña de Sensibilización del Empresariado

3. Captación de participantes (jóvenes con Síndrome de Down y empresas)

4. Detección de “espacio(s) ocupable(s)” en el seno de las empresas participantes

5. Diseño y desarrollo de Programas Formativos y Metodologías de Intervención

6. Evaluación para la mejora de la calidad.

7. Difusión. Para la difusión del proyecto y la captación de participantes (jóvenes con Síndrome de Down y empresariado), además de los recursos locales de comunicación (TV, radio y prensa escrita), el IMFE cuenta con una emisora de radio (IMFE-Radio) que será un instrumento importante para la difusión del proyecto y sus resultados y para la Campaña de Sensibilización del Empresariado.

4. PARTENARIADO

§ Promotor-Coordinador: Instituto Municipal de Formación y Empleo

del Ayuntamiento de Granada

§ Socios-Red Local: - EPSIDO (Estrategias para el Desarrollo Global de

Personas con Síndrome de Down), Grupo de Investigación de la Universidad de Granada

- Asociación Síndrome de Down de Granada

§ Socios-Red Transnacional: - the Bridge project, Liverpool (Reino Unido)

- Comenius Schule, Postdam (Alemania)

5. RESULTADOS

§ Campaña de Sensibilización del Empresariado (Cartelería, folletos, anuncios...)

§ Informe sobre la Situación Sociolaboral de las Personas con Síndrome de Down

§ Página WEB

§ Vídeo de difusión de la experiencia

6. ASPECTOS INNOVADORES

1. Apostamos por los “apoyos naturales”, porque partimos de la idea de que si una persona con Síndrome de Down responde a las expectativas de rol de compañer@s y superiores en el trabajo, su “status” se corresponde con el de cualquier trabajador@; sin embargo, si responde a las expectativas de un@ educador@ (llámese preparador@ laboral, tutor@ de empresa, monitor@...) que le sigue y le acompaña en la empresa, su “status” corresponde al de persona “discapacitada”.

2. Entendemos la lucha contra la exclusión sociolaboral de las personas con Síndrome de Down como una cuestión de derechos humanos, por lo que reivindicamos el empleo en entornos “normalizados” y en empresas ordinarias como única vía que permite acceder al “status” de ciudadan@ adult@.

3. Partimos del supuesto de que para conseguir la inclusión social de las personas con Síndrome de Down hay que incidir en los contextos normalizados, laborales y formativos, hay que cambiar a las empresas y al empresariado... hay que cambiar los centros de formación y al profesorado... hay que construir “un mundo” (unas empresas, unos centros formativos...) a la medida de TODAS las personas, cada una con nuestros niveles de diversidad.

4. Prevemos un sistema de evaluación externa que se desarrollará de forma paralela al propio desarrollo del proyecto y basado en modelos de evaluación democrática y mejora de la calidad.

5. Entendemos la difusión como un proceso continuo, que se inicia antes de la aprobación formal del proyecto y va más allá de la difusión masiva de los resultados del mismo.