Una de las funciones esenciales del sistema nervioso es el control de la conducta. Mientras que los sistemas sensoriales son los puntos de entrada al sistema nervioso, los sistemas motores utilizan las señales neurales para convertir planes de acción en fuerzas musculares contráctiles que reproducen movimientos.

La acción intencionada en los seres complejos requiere una coordinación fina de la actividad simultánea de numerosas vías motoras. Sherrington señaló que la acción integrada del S. Nervioso que hace posible la conducta intencionada depende de una jerarquía de controles motores dentro de un único sistema, en la que la médula espinal es la estructura mas básica. El nivel siguiente es el Tronco y finalmente el Córtex. Dos estructuras asociadas, el cerebelo y los ganglios basales, no están implicadas directamente en la producción del movimiento, sino que mas bien tienen un papel modulador sobre los sistemas corticoespinales y del Tronco.

El descubrimiento de que ciertas deficiencias de neurotransmisión así como determinadas mutaciones genéticas que afectan a las neuronas de los Ganglios Basales, son responsables de las enfermedades de Parkinson y Huntigton nos proporciona nuevos conocimientos acerca de los mecanismos moleculares que hacen posible las funciones motoras.

 

 

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