Presentación

El pasado 31 de enero, el Pleno del Ayuntamiento de Murcia aprobó la propuesta de solicitar la inclusión de la Semana Santa de la ciudad en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad elaborada por la UNESCO. La iniciativa fue anunciada en el mes de noviembre de 2007 por el alcalde de la capital, que se comprometía a iniciar los trámites necesarios para llevar la candidatura hasta el Comité de Patrimonio Mundial.

La Semana Santa murciana se caracteriza por la calidad de sus imágenes procesionales, de escultores como Diego de Ayala del siglo XV, Nicolás de Bussy del XVII, o José Sánchez Lozano y Juan Gómez Moreno del XX. Sin duda, la figura más destacada y que dejó un legado más prolijo es Francisco Salzillo, precursor de una importante escuela que durante el barroco influyó en todo el levante español.

Por otro lado, se acompaña de unas tradiciones que vienen a caracterizar el conocido como “estilo murciano” a la hora de procesionar, y que se mantiene en las cofradías más antiguas de la ciudad. Esto es entre otras cosas, unas vestimentas particulares para los nazarenos de túnicas cortas, esparteñas huertanas y medias artesanas llamadas de “repizco” , corbata, chaqueta y capuz a cara descubierta con cintas. Lo más característico es el amplio seno de las túnicas donde se guardan caramelos para repartir durante la procesión a la gente, una tradición cuyo origen no pone de acuerdo a los investigadores, pero que podría remontarse a la Edad Media cuando los penitentes trataban de reparar sus pecados repartiendo viandas entre los necesitados. Otra de las particularidades es la convocatoria que hace un grupo de nazarenos para anunciar la próxima salida del cortejo procesional, acompañados de una banda de música a ritmo de pasodoble. Las cofradías más antiguas lo hacen acompañados de carros, bocina y timbales.

Todo ello la convierte en una celebración singular que mezcla el fervor popular con las tradiciones más arraigadas del pueblo murciano.

Para estudiar todas los aspectos, fundamentalmente los de carácter inmaterial, que componen esta tradicional celebración y así elaborar un informe y propuesta de solicitud, se prevé la formación de una comisión formada por distintos miembros del Ayuntamiento de Murcia, del Obispado de Cartagena y del Cabildo Superior de Cofradías de la ciudad.

[Paloma López-Sidro López. OPHE]

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