![Investigadores de la UGR al cargo del estudio](/sites/default/files/styles/noticia_interna_2dpr_896_/public/imagenes/noticias/portada/2022-10/20220722_120113%5B11327%5D.jpg?itok=VKB3-f2g)
Científicos de la Universidad de Granada han demostrado gracias al programa Copérnicus y el satélite Séntinel 3 de la Agencia Espacial Europea (ESA) que, durante la ola de calor de los años 2020 y 2021, la temperatura del suelo de Granada capital aumentó hasta 4,4 grados. Concretamente, las temperaturas de la superficie terrestre y la isla de calor urbana de superficie (el primer término hace referencia a la temperatura que presenta el suelo o superficie terrestre, mientras que el segundo hace referencia a las diferencias de temperaturas que existen entre el suelo de una zona urbana y el suelo de una zona rural en un mismo momento) se incrementaron por las mañanas 2,2 ºC y 0,2 ºC, respectivamente mientras que durante las noches los incrementos fueron de 4,4 ºC y 0,4ºC, respectivamente. Además, los investigadores han demostrado que los factores comunes que influyen significativamente en estos incrementos de temperatura diurna y nocturna son incrementos significativos de la radiación solar y cambios en la dirección del viento.