Gasto militar en el Estado español
para 2007
Datos,
tablas, comparaciones y gráficos
Os ofrecemos un año más el análisis del Gasto
militar previsto en los presupuestos generales
para el año en curso. El Gasto militar
contiene las cantidades de dinero público que irán a
parar a fines de tipo armamentístico, militar o
represivo. No solamente el presupuesto del
Ministerio de Defensa es contabilizado,
también otras partidas contenidas en otros ministerios,
como los programas de investigación armamentistica
(Eurofighter, tanques Leopard, submarinos
S-80, helicópteros Tiger, misiles, etc) del
Ministerio de Industria, las misiones exteriores del
Ejército y las aportaciones a la OTAN y la UEO del
Ministerio de Asuntos Exteriores, las pensiones
militares, y los presupuestos de otros cuerpos armados
como Policía Nacional y Guardia Civil, en Interior, etc.
Las cifras hablan claro: para el Gobierno español
matar es más importante que cuidar, curar, educar o el
entorno natural. Según los análisis de José Toribio y de
la Campaña
"Por la paz, no a la investigación
militar", la maquinaria militar,
policial y armamentística recibirá el año que viene el
12% de todo el PGE, 23.052 millones de euros, 63
millones de euros diarios, un 5,7% más que el
pasado año 2006. Esta cantidad
representa, comparada con el presupuesto de otros
ministerios 7 veces más que para Industria y Energía, 13
veces más que Agricultura, Pesca y Alimentación, 18
veces más que para Vivienda, 32 veces más que para
Cultura, 10 veces más que para Medio Ambiente, o 26
veces más que para Sanidad y Consumo.
En el presupuesto de investigación
y desarrollo (I+D) se reproduce el mismo
esquema. Los programas armamentísticos (y ofensivos)
como los citados más arriba recibirán casi 1600 millones
de dinero público, es decir, 5 veces más que el que
recibe la investigación sanitaria, el doble que recibe
las universidades para investigar, 20 veces más que la
investigación agrícola, etc.
Estamos asistiendo a un verdadero proceso
de rearme del Estado español marcado por la doctrina
OTAN que empuja hacia arriba los presupuestos militares
de los países miembros. Un rearme que irracionalmente se
pretende justificar sobre la mera dinamización económica
o creación de empleo ante la ausencia de amenazas
militares reales. Esta profundización en la dinámica
armamentística de la guerra y la violencia no sólo es
éticamente rechazable desde un compromiso sincero con la
paz, sino que también es suicida pues nos coloca a los
ciudadanos como víctimas potenciales.
La propuesta para hacer frente a esta
realidad es asumir nuestra responsabilidad y rechazar
estas políticas a través de su principal fuente de
financiación: la declaración de la renta. La
objeción al gasto militar la llevan a
cabo desde los años ochenta varios miles de personas,
que desvían una partida de su declaración, la misma
cantidad que en porcentaje corresponde al gasto militar,
hacia un proyecto u organización que trabaje realmente
contra las verdaderas amenazas (laborales, sociales,
económicas, políticas, ambientales) a las que tienen que
hacer frente cotidianamente las personas en todo el
mundo.
Comparación
con otros ministerios:
- 7 veces más que para
Industria
- 10 veces más que para
Medio Ambiente
- 13 veces más que para
Agricultura, Pesca y Alimentación
- 18 veces más que para
Vivienda
- 26 veces más que para
Sanidad y Consumo
- 32 veces más que para
Cultura | |
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