Análisis del proceso de la lectura

 

         A lo largo de la historia, el análisis del proceso de la lectura ha pasado de una fase simplista, en la que leer era descifrar un escrito, hasta la actualidad en la que se reconoce su complejidad. Debido a ésta, se han lanzado multitud de teorías sobre este proceso. Las más relevantes son las del tipo psicológico y, entre ellas, las de orientación cognitiva; siendo las tres más destacadas:

 

1.     Natural: Explica que el contacto incidental del niño con la lengua escrita le dispone para la enseñanza formal. Esta teoría se denomina también “emergencia de la lengua escrita”. Su campo de estudio es el desarrollo de la lengua escrita en los niños pequeños. Su foco de atención es la naturaleza comunicativa de la lectura y escritura.

 

2.     Cognitiva: Trata de analizar el proceso de convertirse en lector. La lectura se describe como un proceso de pensar, razonar y resolver problemas, utilizando el material escrito,  para alcanzar un amplio conjunto de objetivos. La aportación más valiosa de este enfoque es la enseñanza de estrategias, propias del lector eficiente.

 

3.     Sociocultural: Esta teoría defiende que el lenguaje escrito se adquiere en la interacción con otros, lo que supone la participación en actividades en las que se necesita la lengua escrita. De este enfoque derivan algunas consecuencias para la enseñanza: el primero, es que la enseñanza se desarrolla en un contexto social; el segundo, que la lengua escrita es una habilidad global que no puede automatizarse en habilidades discretas, y, el tercero, que las influencia de las diferencias culturales en el desarrollo de la lengua escrita.

 

Como acabamos de ver, no hay unanimidad en el análisis de este proceso. Donde sí la hay es en los componentes que definen la lectura. Dichos componentes son procesos psicológicos, que pueden agruparse en tres categorías básicas:

 

1.    Descodificación: Visual (logográfica) y auditiva (fonológica)

 

2.    Comprensión: Del significado de las palabras, de frases y palabras y global del texto.

 

3.    Metacomprensión: Conciencia de los procesos y control de los procesos.

 

Hay que subrayar que todos estos procesos están relacionados en el objetivo final, pero pueden considerarse como capacidades independientes. Veamos ahora, resumidamente, cada proceso:

 

1.    Descodificación: Descodificar es descifrar. Este proceso comprende las habilidades y el conocimiento por los que el lector pronuncia una palabra escrita. Se pueden señalar dos vías o modos de descodificación:

 

a)     Visual (o logográfica): El lector percibe y reconoce la palabra escrita como una unidad global; es decir, como un dibujo que representa un significante. En este sentido, se dice que la palabra pertenece al vocabulario visual del lector (la unidad de segmentación visual no es la letra, sino la sílaba).

 

b)     Auditiva (o fonológica): El lector reconoce los grafemas (representados por las letras) y su correspondencia con los fonemas. La palabra es entonces pronunciada; aunque, sea de forma imperceptible. Esta vía, generalmente, la usan los adultos.

 

En definitiva, para reconocer una palabra, debe tenerse en cuenta tanto el código ideográfico como el fonético, en un proceso global de codificación intermodal (síntesis de las dos vías).

 

2.    Comprensión: Puede describirse como la construcción del significado del texto, por parte del lector, de acuerdo con sus conocimientos y experiencias.

 

En este proceso se distinguen varios aspectos o dimensiones, en función de la unidad lingüística, objeto de comprensión:

 

a)    Comprensión del significado de las palabras: Este proceso también se denomina “acceso al léxico”. En él desempeña un papel muy importante la descodificación, como proceso que facilita el acceso al léxico a través de las dos vías antes descritas.

 

La comprensión (el significado) de la palabra, es el objetivo final del proceso de descodificación.

 

b)     Comprensión global del texto: En este proceso, el lector adopta varias estrategias cognitivas: inferencias, predicción y comprobación de hipótesis. Las inferencias las usa uniendo dos fragmentos de información en una construcción nueva. El lector, también predice lo que vendrá posteriormente en el texto, a partir de lo que ya ha leído o de lo que sabe sobre le tema del texto. Igualmente, formula hipótesis cuya validación se establece confrontando sus representaciones mentales con las características del texto y con la intencionalidad del autor.

 

3.    Metacomprensión: Para que la compresión sea efectiva, el sujeto debe cumplir dos condiciones:

 

a)     Tener conciencia de los procesos y habilidades que se requieren para lleva a cabo la tarea de la lectura.

 

b)     Ser capaz de determinar si lo está realizando correctamente y corregir lo que fuera necesario.

 

Hay que señalar que en el proceso de la lectura se ponen en juego diversas habilidades del lector, como los conocimientos previos, el dominio de la lengua, la conciencia lingüística y de los objetivos de la lectura, etc. También, incide significativamente el contexto, facilitando o dificultando el proceso de comprensión.