Desde el día 6 de febrero del presente año 2007 y durante tres días, han tenido lugar los traslados de los once leones de la famosa fuente nazarí –el león número 4 había sido retirado con anterioridad- desde el Palacio hasta el taller de restauración para ser intervenidos.

El proceso durará dos años, aproximadamente hasta diciembre del año 2008 y costará 550.000 euros. Se realizará en tres fases:

1. Restauración de los once leones.

2. Restauración de la taza in situ .

3. Rehabilitación del circuito hidráulico.

El traslado del león número cinco se realizó con un equipo de ocho personas que montaron una caja de madera con estructura metálica alrededor del león y un soporte con ruedas para que los 300 kilos de peso del león se movieran con la mayor suavidad y seguridad posible.

El Palacio permanecerá los dos años sin los leones y, aún así, cuando la operación haya terminado, un comité específico decidirá si los leones vuelven o no a la fuente o si se expondrán copias. María del Mar Villafranca, Directora del Patronato de la Alhambra , aseguró que su deseo es “devolver los leones a su lugar original, a no ser que los técnicos que forman el consejo decidan lo contrario en su momento”.

Ya se han oído algunas voces de protesta a esta idea e incluso la Asociación de Defensa del Patrimonio Histórico Andaluz, por medio de su portavoz, Joaquín Egea, ha pedido que se hagan unas “sencillas réplicas” que no hagan diferir tanto la imagen buscada por los turistas de la real.

Son varias las acciones que está llevando a cabo el Patronato de la Alhambra con respecto a la intervención de los leones de la fuente.

En primer lugar, la exposición en el Museo de la Alhambra de Granada del recientemente restaurado león número cuatro de la Fuente “de los Leones”, una de las más importantes muestras de la escultura musulmana, sita en el Palacio del mismo nombre. La restauración de la pieza forma parte de una primera fase del proyecto denominado “Fuente de los Leones”, que ocupa una parte importante en las labores de conservación que lleva a cabo el Patronato.

Por otro lado, el traslado, durante los días 6, 7 y 8 de febrero de los once leones restantes desde el Palacio nazarí hasta el taller de restauración, donde serán intervenidos. El proceso completo durará hasta diciembre del año 2008 aproximadamente y tendrá un coste de 550.000 euros.

El paso del tiempo, los momentos de abandono, los agentes atmosféricos, las reformas realizadas con anterioridad (se conoce una que podemos datar en el siglo XVI y posteriormente se han realizado labores de reparación y mejora hidráulica), la acción humana, el propio funcionamiento de la fuente (está sometida continuamente a la acción del agua y la intemperie), la baja calidad del agua y las reacciones químicas de la piedra, han hecho necesaria la intervención restauradora de los Servicios Técnicos del Patronato de la Alhambra y el Generalife.

La intervención de los once leones será la misma que se realizó sobre el león número cuatro. Ésta consistió en la eliminación de las gruesas costras calcáreas que lo cubrían (de un espesor de entre 4 y 20 mm ), que ha detenido la acción e invasión de elementos biológicos y ha consolidado roturas de distinto origen.

El proceso de restauración llevado a cabo ha sido el siguiente:

1.  Diagnóstico de las alteraciones de la pieza, haciendo un estudio pormenorizado de los daños sufridos. Así, se encontró:

•  Ataque biológico. Depósitos de heces de aves y, debido a la humedad de la fuente, creación de las condiciones necesarias para el desarrollo de hongos.

•  Roturas y grietas. Al producirse en Granada temperaturas muy bajas durante el invierno, el agua que se introduce en los poros de la piedra, cristaliza provocando tensiones que se traducen en grietas en la superficie e interior del mármol.

•  Depósitos calcáreos. Pueden deberse a las eflorescencias (sales constitutivas de la piedra, que en combinación con el agua producen un efecto blanquecino en la superficie de la misma) y a los factores externos de contaminación, excrementos de animales, polvo acumulado, etc.

•  Restauraciones antiguas. Como hemos comentado anteriormente, las intervenciones anteriores se han realizado en relación a la mejora hidráulica.

2. Limpieza de la pieza mediante diferentes técnicas al objeto de eliminar la costra calcárea. En este sentido cabe hablar de:

•  Limpieza mecánica: Realizada con bisturí y otras herramientas erosivas (fresas...).

•  Limpieza química: Se utilizó CO3 + Amonio. Unido a los métodos mecánicos.

•  Limpieza con láser. Con este método, la eliminación del material es selectiva: no se dañan zonas sobre las que no se pretende intervenir, se puede controlar la cantidad de material eliminado y evita en muchos casos el uso de disolventes que pueden ser tóxicos y/o contaminantes.

3.  Desalación de la pieza. Consiste en la inyección de agua desionizada hasta conseguir que el nivel de sal en la pieza sea el adecuado.

4.  Reintegraciones. Las lagunas de mármol se han reintegrado mediante mortero. La zona de mayor pérdida de material se encontraba en la parte superior de la cabeza, que se ha reconstruido imitando la forma general, sin entrar en mayor detalle para que la intervención sea reconocible.

El resto de las pérdidas eran de mucho menor tamaño y se trataba prácticamente, de rellenar grietas.

Finalmente, la reintegración también ha conllevado igualar el color del mortero al del mármol macael blanco original. Se ha efectuado mediante la técnica de rigattino, consistente en practicar rayas de colores muy delgadas y muy próximas entre sí proporcionando una vibración de tono apreciable a poca distancia, pero invisible desde el punto de vista normal del observador.

Tras la restauración se han descubierto aspectos que antes habían permanecido ocultos:

•  Mayor naturalismo de la talla, estilización y esbeltez de la figura.

•  Mayor refinamiento técnico, delicadeza y precisión en la talla.

•  Visiones laterales diferenciadas, huyendo de la simetría.

•  Mayor detalle en el trabajo escultórico, sobre todo en la garras y pelaje del abdomen, donde se aprecia una mayor profundidad de la talla y mayor definición del relieve que antes quedaba cubierto por la suciedad.

En cuanto a la rehabilitación del circuito hidráulico, según palabras de María del Mar Villafranca, Directora del Patronato de la Alhambra , “va a suponer la mejor regulación del surtidor de cada fuente del conjunto y la incorporación de una instalación de reciclado orientada a mejorar la calidad del agua y su mantenimiento”.

La taza dodecagonal de la fuente de 2.52 metros de diámetro, se va a restaurar in situ y la zona se protegerá con unas mamparas transparentes para que el público pueda contemplar las obras de la fuente más conocida de la Alhambra.

[Noelia María Ortiz de la Torre. OPHE]