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En esta página se incluyen algunos consejos y cosillas que pueden ser útiles a la hora de preparar el Interail. Información general El Interail es un billete de tren que, por un precio fijo, permite viajar en trenes de segunda clase por paises europeos durante un periodo de tiempo sin limitación en cuanto al número de trayectos que se realicen. Cuando se compra el billete (el Interail), se decide para qué paises se desea utilizar y por cuanto tiempo. Los paises se organizan por zonas. En mis tiempos (allá por el 94) las zonas estaban organizadas así:
Deberás elegir qué zonas te interesan. Es posible seleccionar una, dos, tres o todas. Además, la validez del billete puede ser por quince días o un mes. Los precios varían según el número de zonas elegidas y la duración del billete. Si las zonas elegidas no son fronterizas con España, el billete proporciona un descuento del 50% en el viaje de ida y vuelta desde el punto de partida hasta la fontera del pais elegido más cercano. Para comprar el billete o pedir más información puedes ir a una oficina de Renfe o a una de TIVE. Preparativos en casa... Hay algunas cosas que deben prepararse antes de salir:
De viaje. Los trenes. Con los billetes comprados, la documentación a punto y la mochila lista, podemos ir a la estación más próxima y empezar el Interrail. Como se ha dicho anteriormente, el Interail permite viajar en segunda clase de cualquier tren dentro de los paises elegidos. Quedan fuera de alcance los trenes de alta velocidad, ojo. El billete tampoco incluye la reserva del asiento. Esto quiere decir que por tener el Interail tienes derecho a ir en el tren, pero no sentado. Si se quiere asegurar un asiento hay que reservarlo (y esto cuesta pelas). ¿Qué es lo mejor? Si vas justo de dinero (lo más normal), lo mejor es no reservar. En la puerta de cada compartimento suele haber un indicador con los asientos que están reservados. Lo más aconsejable es: Llegar a la estación con tiempo. Subir al tren el primero. Si sois varios, es mejor que uno suba rápido al tren (sin la mochila a cuestas) y se dedique a buscar un compartimento con asientos sin reservar. Una vez encontrado, indicará a los demás que suban. Esta táctica se aprende después de recorrer muchos vagones de tren con la mochila encima, esquivando gente y agobiado por no tener dónde aterrizar... Dónde dormir A la hora de decidir dónde dormir hay tres alternativas básicas: En el tren, en un albergue/camping o al aire libre. Los trenes son una alternativa a la hora de decidir dónde dormir pero ojo, son muy incómodos y acabas muy quemado si duermes en ellos varios días. Por otro lado, el agua de los servicios no es la mejor para lavarse o afeitarse (aunque para una emergencia...). Por tanto, yo recomiendo usarlos para dormir en contadas ocasiones y cuando se puedan aprovechar para hacer largos trayectos nocturnos. Los albergues/campings tienen ventajas e inconvenientes (como casi todo en la vida). Por un lado, proporcionan cama (los albergues), ducha y otros servicios dependiendo del caso concreto (lavadoras, secadoras, consignas, comidas...). Por otro lado, pueden salir algo caros si se lleva un presupuesto ajustado (el más barato sale por unas 1500 pesetas/día). El dormir al aire libre es la alternativa más barata (como que es gratix) pero a la vez más arriesgada y además carece de las ventajas higienicosanitarias de las alternativas anteriores. Hay que tener en cuenta que en algunos paises está prohibido dormir en la calle o en parques y en grandes ciudades no es muy aconsejable dormirse en cualquier esquina... Si se opta por utilizar este método en alguna ocasión, recomiendo buscar pueblos tranquilos a las afueras y duchas públicas (que en algunos paises son muy buenas) o piscinas para la cuestión higiénica :) ¿Qué hacer? Todo depende del presupuesto, las ganas de aventura, el miedo a la oscuridad... En mi caso, me fue bastante bien utilizando las tres alternativas. Cuando visitamos París, por ejemplo, dormimos en el parque de un pequeño pueblo a las afueras (el Interail permite utilizar los trenes de cercanías franceses). En Bélgica utilizamos un campo de futbol... Ir a un albergue también es un gustazo (comida, cama, calorcito...) pero claro, el poder permitirse uno todos los días es cuestión de presupuesto. Llegar a una ciudad Lo más práctico, llegados a un gran ciudad, es visitar una oficina de turismo para conseguir un plano e información sobre albergues (parques y duchas públicas), monumentos, barrios interesantes... En las grandes estaciones suele haber oficinas de este tipo, así que no hay que andar mucho... Algo muy aconsejable es dejar las mochilas en una consigna si se va a estar en una ciudad sólo un día. El ir a todos lados con la mochila a cuestas puede acabar con la espalda de más de uno y el cansancio acumulado es de las peores cosas a la hora de viajar. La mayoría de las estaciones de tren europeas cuentan con consignas donde se puede dejar una mochila grande por un módico precio.
En fin, se me ocurre poco más que pueda ser útil. Sólo darte ánimo si quieres hacer el Interail ya que es una aventura que merece la pena. Si tienes dudas o crees que sería bueno añadir alguna cosa a esta página envíame un mensaje por correo electrónico. En mi página Interrail '94 se incluyen anécdotas y fotos del viaje que hice aquel año por Europa con mi amigo Migue. |